sábado, 29 de junio de 2013

La ardiente soledad, sientela


Los ardientes gritos
de las infernales tinieblas
lentamente, escúchalos.

Tras sus gélidos corazones
la soledad que esconden,
pon tu mano y siéntela.

De la molesta luz del sol
refugiados, detrás de eternas
lunas llenas unos rojos pétalos
están, esperan poder salir.

Detrás de inexplicables tentaciones
con tu rojiza sangre, sus enigmáticas
puertas, muy poco a poco, ábrelas.

En sus negruzcos cielos
muertos de sed, abrázalos.

Antes de que amanezca
sus dulces llamas bésalas.

Tus afilados colmillos clavamelos
y de inmortales espinas vestidas
de oscuridad bebamos y para todo
el resto de la eternidad, cada noche
de frío invierno juntos quedémonos.

martes, 18 de junio de 2013

¿Por donde te escondes?

Por oscuras arboledas
vestidas de fríos inviernos
indago sin respuesta.

Ante desoladas rosas
sin espinas, por favor,
ante mi, aparecete.

Sin esos eternos abrazos
que mi grisácea lápida
embriagaban, no puedo estar.

De nuevo, de tu pequeño
escondrijo de impenetrables
túneles, te invito a caminar.

De nuevo, sangrientas tormentas
hacia mi ennegrecido corazón,
como si fuera la primera vez,
mis gélidos muros, atraviesalos.

Deja que lentamente, mis afilados
colmillos digan lo mucho que de menos
echaron el beber de tu sangre.

miércoles, 12 de junio de 2013

Ven aqui, sangrienta eternidad


Cuando el anochecer llegue
bajo la luna llena, a tu gélido ser,
mis eternos besos entregaré.

Lentamente, en tus negros
túneles vestidos de mentiras
y falsedades, déjame entrar.

Tanto te amo que cada gota
de tu roja sangre, en mis vacías
por siempre, deseo guardar.

Por favor, esos azulados ojos
que fijamente a los míos solías
mirar, te pido que los abras.

Sangrientos y placenteros besos y frías
caricias repletas de ardientes
infiernos, entre grisáceas lápidas,
ayudemos a recuperarlos.